Tengo familia en Liébana y en Llánaves (ésta un poco más lejana) y me he enterado de las posturas que mantienen estos familiares respecto a la estación.
Los lebaniegos estan totalmente en contra, son montañeros, practican el esquí de travesía y sobretodo son ecologistas; mi tío (ya sabéis el parentesco) fue la primera persona, hará algo más de 20 años, que estando en la montaña (acampados en Curavacas) llevaba jabón natural biodegradable para contaminar lo menos posible, y eso por aquel entonces no lo hacía prácticamente nadie.
El de llánaves (primo de mi padre, lo digo por igualar) está totalmente a favor. Antes tenían ganado arriba y ya hace muchos años que vive del turismo en Potes. Por supuesto cree que con la estación podrá volver a trabajar a su pueblo.
Lo que más rabia me da no es que crea que va a trabajar allí, que bueno, posiblemente sí sino que cree, como mucha otra gente de allí que...
se van a forrar, que esto va a ser el gran pelotazo. El tiempo lo dirá pero yo creo que la tajada, si esto sigue adelante se la llevarán los que van a poner la pasta y las decisiones.
Coged el ejemplo de Brañavieja, después de tantos años funcionando ¿quién se ha forrado gracias a la estación?, no muchos, si nisiquiera el ayuntamiento ha conseguido un núcleo de población estable cerca de la estación. ¿y cómo son los trabajos que tiene la gente de la zona contratados por la estación? contratos temporales unos, veranos en Cabárceno otros (y eso no es precisamente un trabajo cerca de casa)... y de los sueldos ni hablamos. Y eso en años buenos, en las épocas en las que no ha habido nieve prácticamente no han visto un real, y además sin buscar otros proyectos alternativos porque "seguro que el año que viene sí hay nieve"
Si los tribunales no lo detienen antes, será el tiempo el que nos enseñe cuánto va a mejorar la vida de la gente de la zona y no auguro nada bueno.
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